Eclesiastés 3:18 Dije en mi corazón: Es así, por causa de los hijos de los hombres, para que Dios los pruebe, y para que vean que ellos mismos son semejantes a las bestias.
19 Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad.
20 Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.
Y ahora vamos a ver qué es Cuerpo, Alma y Espíritu:
Creo que todos entendemos lo que es el cuerpo—todos tenemos un cuerpo visible y no será necesario explicar el cuerpo. Lo que estudiaremos ahora son el alma y el espíritu.
La palabra “espíritu” en Hebreo se escribe “ruach”.
La palabra “alma” en Hebreo se escribe “nephesh”.
No es necesario recordar esto, pero se lo quiero mencionar para que entienda bien lo que estamos estudiando.
Comencemos con lo que quiere decir “espíritu”. Busquemos en la Biblia algunos lugares que se refieren a “espíritu”, o “ruach”. Podemos comenzar con Salmos 27:3 que dice: “todo el tiempo que mi alma este en mi, y haya halito de Dios en mis narices . . .” Esa palabra “halito” en Hebreo es “ruach”. El significado de “espíritu” en el idioma original de Hebreo, es “halito” o “viento” o “respiración”. Así que cuando dice que hay “halito de Dios” en mis narices, eso realmente dice, “el espíritu de Dios en mis narices.” Y ¿qué es lo que tenemos en nuestras narices? Aire o viento o respiración.
El Salmista escribió en Salmos 104:29 lo que le pasa a uno cuando se muere: “Escondes tu rostro, se turban; les quitas el halito (ruach), dejan de ser, y vuelven al polvo.” Eso quiere decir que se le va el espíritu (respiración) del hombre y el vuele a ser polvo (Génesis 3:19), o que una vez que esta en el sepulcro por cierto tiempo, se vuele a ser tierra.
Eclesiastés 3:19-21 es largo, así que le pido que lo lea en su Biblia. Hare algunos comentarios. El versículo 19 nos da a entender que el futuro del hombre y del animal son lo mismo—todos mueren. Dice (en versículo 19) “una misma respiración tienen todos.” En la lengua Hebrea dice, “Un mismo espíritu tienen todos” porque “espíritu” y “respiración” son las traducciones de “ruach”.
El versículo 21 dice, “¿Quien sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y que el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?” Debe ser que en esos días también se pensaba que cuando un animal moría, su “espíritu” o “respiración” iba hacia la tierra, pero el “espíritu” del hombre subía arriba (para el cielo.) Eso es lo que muchos piensan hoy—que cuando uno muere, su espíritu va al cielo. Pero la Biblia explica que el “espíritu” es sencillamente el respiro o el halito, y que “una misma respiración (espíritu) tienen todos . . .”
Salmos 6:5 dice, “Porque en la muerte no hay memoria de ti (de Dios); En la tumba, ¿quién te alabara?” Supongamos que una persona muere y va al cielo. ¿No le parece que alabaría a Dios por haberle llevado a morar con El? Pero el versículo dice que no hay memoria de Dios y no hay alabanzas para El.
Ahora estudiemos lo que la Biblia dice acerca del alma. Miremos nuevamente al Hebreo para refrescar la mente.
La palabra nephesh es traducida al Español como “alma” o “ser viviente” o “vida”. Leamos pues en Génesis 1:27 donde dice, “Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo; varón y hembra los creo” En el capitulo 2 y el versículo 7 leemos como Dios lo creo: Dice así: “Entonces Jehová Dios formo al hombre del polvo de la tierra (el cuerpo), y soplo en su nariz aliento (halito o respiro) de vida, y fue el hombre un ser viviente, (alma) que en Hebreo es “nephesh”.
¿Cómo creo Dios al hombre? Después de haber creado el cuerpo del polvo de la tierra (que aun no tenia vida), El “soplo en su nariz aliento (halito o respiro) de vida, y fue el hombre un” alma” o un “ser viviente”, que son la misma cosa. Ese cuerpo sin vida se transformo en un alma (o ser viviente) porque Dios hizo la unión de cuerpo y soplo, Dios introdujo vida al hombre con el acto de darle respiración. Eso produjo el alma. Se podría decir produjo “una persona viva”.
Usted pregunto, “como surge el alma en nosotros? El alma (ser viviente) se formo cuando Dios unió un cuerpo con el soplo de vida.
Otra pregunta. ¿Cuando se separa el cuerpo del soplo, ¿qué pasa?
Quisiera darle una pequeña ilustración. Digamos que usted tiene un foco de luz eléctrico. Llamaremos el foco “cuerpo”. Hay electricidad (soplo) en los alambres, pero la luz esta apagada. Cuando usted conecta la electricidad con el foco ¿qué pasa? Hay luz.
Cuando usted apaga la electricidad ¿dónde va la luz? No va a ningún lugar. Sencillamente deja de existir porque se quito la electricidad. Es así mismo con el cuerpo humano cuando se le quita el soplo (halito o aliento) de vida. La vida (el alma) deja de existir.
Otra ilustración. Digamos que usted tiene una pila de tablas (comparemos las tablas con el cuerpo) y una pila de clavos (que las comparamos con el soplo o de vida).
Usted toma las tablas y los clavos y con un martillo, forma un cajón de esas dos partes. Luego usted saca todos los clavos (el halito) y los pone otra vez en su lugar. Hace nuevamente la pila de tablas. ¿Dónde fue el cajón? El cajón ya no existe porque usted separo las dos partes que formaron el cajón.
Es así con el alma. Como el alma es hecha de cuerpo y soplo de vida (halito, aliento)—cuando uno separa esas dos partes, el alma deja de existir. No va a ninguna parte.
Muchos piensan que en muerte, el alma continua a vivir en el cielo con Dios. Piensan que el alma no puede morir. Pero Ezequiel 18:20 dice: “El alma (el ser viviente) que pecare, esa morirá . . .” Los pecadores morirán.
Entonces, ¿qué muere cuando una persona muere? Eclesiastés 9:5,6 dice: “Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen mas paga; porque su memoria es puesta en olvido. También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca mas tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol”.
El alma (la persona) muere, y junto con el mueren sus pensamientos, su amor, etc. Todo muere hasta el día de la resureción.
1 Tesalonicenses 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
Espero que esto te ayude a entender el texto que hemos visto al inicio. El aliento de vida es el mismo en los hombre y las bestias, lo que es diferente es el cuerpo que lo recibe
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